Londres (Martes, 24-03-2009, Gaudium Press) 2.390 condenados a muerte en todo el mundo fueron ejecutados en el año 2008, informa un relato de la ONG Anistia Internacional (AI) divulgado este martes (24). Las ejecuciones fueron hechas en 25 países y contabilizan un total de siete por día.
También el año pasado, 8.864 personas fueron condenadas a muerte. Cinco países - China, Irán, Arabia Saudita, Paquistán y Estados Unidos - son responsables por 93% de las condenas.
China ejecutó por lo menos 1.718 personas, lo que equivale a 72% del total mundial. La organización considera, sin embargo, que el número debe ser mayor, ya que Pekín no divulgaría los datos completos.
Asia es el continente con más ejecuciones, donde 11 países - Afganistán, Bangladesh, China, Indonesia, Japón, Corea del Norte, Malasia, Mongolia, Paquistán, Singapur y Vietnam - aplican la pena capital.
En Europa, Bielorrusia es el único país que aplica la pena de muerte. En Asia Central, Uzbequistán abolió la medida, después de haber ejecutado cuatro personas en 2008, según la AI.
Los Estados Unidos registraron 37 ejecuciones el año pasado, 18 de ellas en el estado de Texas. Este es el menor número desde 1995, lo que indica para la Anistia que está "cada vez más claro que hasta los Estados Unidos se desvía progresivamente de la pena capital".
Dos tercios de las naciones del planeta ya renunciaron a la pena de muerte. De los 59 países en que la medida sigue en vigor, apenas 25 la aplican.
"La buena noticia es que apenas un pequeño número de países realiza ejecuciones, señal de que avanzamos para un mundo sin pena de muerte", afirmó Irene Khan, secretaria-general de la Anistia Internacional.
Solamente dos ejecuciones (en Botsuana y en Sudán) fueron registradas en África Subsaariana en 2008, región que tuvo 362 condenas a muerte en el período.
Oriente Medio y África del Norte son, después de Asia, las regiones en que el mayor número de personas fueron ejecutadas (508). Irán, que ejecutó por lo menos 346 condenados, violó la ley internacional, según la AI, al ejecutar ocho menores de edad.
La causa por el fin de la pena capital sufrió dos derrotas en 2008. San Cristóvão y Névis se tornó el primer Estado del continente americano, además de los Estados Unidos, a aplicar la pena de muerte desde 2003. En África, Libéria restableció la medida para los condenados por estupro o actos de terrorismo.
A AI baseia o relatório em estatísticas oficiais e nos dados divulgados por ONGs, defensores dos direitos humanos, meios de comunicação e famílias de vítimas.